LA MÚSICA TIENE QUE BREGAR CON LA VIDA

El músico salsero Willie Colón declaró que la canción Narcomula, incluida en su reciente disco El Malo Vol.II: Prisioneros del Mambo, es una protesta contra del uso de las drogas. Colón, quien nunca ha negado su relación con ese mundo en tiempos de Fania y de su amigo Héctor Lavoe, recordó que en los setenta lo llamaban para que hablara sobre el uso de las drogas en las escuelas. Años más tarde, y con una larga carrera como productor, trombonista y cantante encima, decidió vincularse por esta razón a la política. Sus primeros cargos fueron como lider comunitario, luego como asesor de asuntos hispanos. Actualmente trabaja como funcionario de la Comisión de Entretenimiento y Medios Latinoamericanos, la cual depende del alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, a quien ayudó en su campaña. "Antes de Bloomberg, no se hacía nada en la ciudad. Ahora, estamos tratando de hacer producciones de películas y televisión y que demuestre la diáspora del pueblo más grande de Puerto Rico", dijo. Colón participó en el Desfile Nacional de Puerto Rico en Nueva York, y tanto entonces como en la presentación de su disco, fue muy crítico con la música puertorriqueña actual. "El reggaetón se va a pique", advirtió antes de abrirle una salida digna: "Tiene que desarrollarse de un ritmo a un concepto como la salsa, que abarca toda clase de ritmos". El músico neoyorquino también dijo a EFE y a El Nuevo Día que esta circunstancia es similar a la que pasó con la salsa romántica en los ochenta: "Se enfocó en una sola dirección y perdió su esencia y conciencia social". Colón finalizó diciendo: "Para que una música se mantenga vigente tiene que bregar con la vida. El arte de componer y la elocuencia con que se dicen las cosas, son importantes".